El parque de Tablada: la unión social busca soluciones a un conflicto del agua y del urbanismo
El próximo viernes 26 de noviembre, a las 19h en el Salón de Actos de EMASESA (Calle Escuelas Pías 1) tendrá lugar una conferencia-coloquio sobre Tablada en el PGOU de Sevilla, para abordar las oportunidades y estrategias para la llanura inundable del Guadalquivir.
El conflicto del parque Metropolitano de Tablada no es solo un conflicto urbanístico más, sino que suma el conflicto del agua derivado de las graves consecuencias que tendría la ocupación del valle de inundación del Guadalquivir con 20.000 viviendas, precisamente en el lugar más desfavorable de la cuenca baja, donde el valle se reduce a 750m de anchura. El proyecto impulsado en origen por las cajas de ahorro, proponía reducir el rio a un canal hidráulico, bendecido incluso por expertos consultores del agua, que contribuyeron a dar cobertura a un desmán ambiental sin precedentes, que gracias al apoyo de la Plataforma ciudadana y la batalla jurídica que llevo en solitario uno de los promotores iniciales Jesús López, lleva más de 25 años pendiente de solución, estando catalogado como uno de los más importantes de Andalucía y de España. Sin embargo, la condición de propiedad privada de los terrenos, y un larguísimo recorrido judicial, mantiene bloqueada la condición de este espacio.
Para los que no conocen en profundidad el origen del conflicto de Tablada hay que aclarar que los suelos fueron públicos desde la edad media hasta el siglo XX, cuando en 1997 una serie de decisiones cortoplacistas de las administraciones, la avidez especulativa de algunos y la complicidad por inacción de otros, dieron como resultado que los terrenos del antiguo aeródromo de Tablada cambiaran de propiedad pública (Ministerio de Defensa) a un consorcio privado formado por las empresas promotoras más importantes de Andalucía. Si los responsables de entonces hubieran antepuesto el interés general sobre el interés particular el destino hubiera sido muy distinto, la Dehesa de Tablada hubiera revertido a la ciudad mediante un simple y habitual acuerdo político entre administraciones públicas por el interés general de la sociedad contemporánea.
Es hora de encontrar una solución definitiva al conflicto, que solo puede dar fruto desde la unión de fuerzas sociales de la sociedad sevillana junto con las administraciones publicas competentes en urbanismo y planificación del agua. El primer paso ya ha comenzado recientemente con la unión de más de 30 asociaciones ciudadanas de diversa naturaleza y fines, con la creación de la Mesa Ciudadana por Tablada, que ha solicitado encuentros con todas las administraciones para convencerlas que en estos momentos de indeterminación es crucial para las generaciones próximas disponer un pulmón verde metropolitano, que por su posición central en el área metropolitana permite concebir a la ciudad de Sevilla de forma similar a las grandes ciudades europeas, donde los grandes parques forman parte univoca de la imagen de ciudad contemporánea.
Hasta la fecha la ambigüedad de las administraciones manifiesta una actitud pasiva, esperando que se aclare el panorama jurídico, y sin pronunciarse explícitamente en el fondo del problema, esquivando responsabilidades. Es hora de encontrar soluciones entre todos y conseguir que los suelos sean de nuevo públicos, como fueron en tiempos de Alfonso X el Sabio.
De la misma manera que el potencial de la ciudad de Sevilla no se puede medir solamente en términos de su potencial turístico, los retos de la industria aeroespacial, o el valor de sus empresas, que siendo imprescindibles desde la estrategia económica global, no dicen mucho más si dejamos a un lado factores como el importantísimo capital natural y todos los recursos ecosistémicos asociados al recurso del valle inundable del Guadalquivir, un espejo del Parque de Doñana en la ciudad, entre los cuales figuran las 350ha que forman la Dehesa de Tablada, un espacio natural al servicio de las futuras generaciones de Sevilla y su Área Metropolitana. Del mismo modo que dice el reciente premio Princesa de Asturias de las Ciencias Sociales, el Nobel de Economía -Amartya Sen-, el primero en defender que un país no se mide solo por el valor económico del producto interior bruto, sin incorporar una mirada al bienestar social en términos de equidad y justicia social, disponer de un pulmón verde en la ciudad de Sevilla con esta dimensión nos colocara a la altura de aquellas ciudades como Berlín, Nueva York, Paris o Londres, que son conocidas por la importancia de sus parques territoriales: Tempelhoff, Central Park, Bois de Boulogne y Kew Gardens, respectivamente.
Debemos sentirnos afortunados por la situación del planeamiento urbano y territorial, pues tanto el Plan General de Ordenación Urbanística de Sevilla en 2006 como el Plan de Ordenación Territorial en 2009 reforzaron la protección de las 350ha de la Dehesa de Tablada como suelo no urbanizable de especial protección, por su condición inundable de la llanura del Guadalquivir para garantizar su funcionalidad en caso de avenidas, y el importante potencial de valores naturales, ambientales, paisajísticos y culturales, que motivan ya sin ninguna duda la creación de un gran espacio naturalizado para usos públicos y dotacionales, que incluyen la consideración de este espacio como un “pulmón verde” metropolitano al servicio de una población de más de 1,5 millones de habitantes, destacando su condición central en el valle del Guadalquivir y la accesibilidad potencial desde el transporte metropolitano.
La reciente iniciativa ciudadana Mesa por Tablada, formada por más de 25 entidades ciudadanas, ha solicitado a las administraciones la declaración del espacio natural como Parque Periurbano, que sería sin duda un paso trascendental para facilitar el fin del larguísimo recorrido judicial de este territorio, y el inicio de su deseable reversión a lo público.
Queremos que Tablada sea verde y pública porque sabemos que sólo el carácter público de estos terrenos, garantizan a las generaciones venideras la oportunidad de gozar de un espacio verde en el corazón de la región urbana de Sevilla, y hacemos notar que no hay ningún aspecto en la ley de Espacios Naturales protegidos de Andalucía que impida que terrenos de titularidad privada sean declarados protegidos.
Artículo de Indalecio de la Lastra Valdor, ingeniero de Caminos, miembro de la Coordinadora Local de IU y de la Mesa Ciudadana de Tablada