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Emergencia climática (Moción para la Comisión de Control- Noviembre 2023)

INCREMENTO DE INFRAESTRUCTURAS VERDES EN LA CIUDAD DE SEVILLA PARA COMBATIR EL CAMBIO CLIMÁTICO, AUMENTAR LA ADAPTACIÓN A LA SITUACIÓN CLIMÁTICA Y MEJORAR LA BIODIVERSIDAD URBANA

EXPOSICIÓN DE MOTIVOS

Casi todas las instituciones han reconocido, incluso declarado el estado de Emergencia Climática, pero la situación actual del medioambiente debido al Cambio Climático requiere, por su urgencia, de ir más allá de declaraciones y realizar un giro de 180 grados en nuestra forma de vida. Toca, y con urgencia, tomar medidas.

En España, junto al resto de los países industrializados, tan solo vivimos un 20% de la población mundial; sin embargo, somos los principales responsables del cambio climático ya que emitimos prácticamente el 75% de los gases de efecto invernadero (GEI) totales a la atmósfera.

La ciencia ha sido muy clara: si desde ahora hasta finales de siglo permitimos que la temperatura media de la Tierra (14ºC) aumente más de un grado y medio, prácticamente todos los sistemas ecológicos se verán comprometidos.

En los últimos años, el movimiento vecinal sevillano, de manera contundente, ha venido defendiendo que la infraestructura verde en nuestra ciudad debe adquirir un papel destacado en la ordenación territorial, la política y la investigación de forma urgente. Esta infraestructura verde se entiende como una red de características físicas que proporciona beneficios ecológicos y sociales a la sociedad a través de soluciones basadas en la naturaleza, como base para el bienestar humano y la calidad de vida. En Sevilla, la infraestructura verde puede estar compuesta por zonas verdes y azules, como parques, arbolado urbano, río Guadalquivir y tejados verdes.

Dado el nivel de deterioro de nuestros territorios y al que hemos sometido a nuestro planeta, nuestra responsabilidad no es solo la conservación, sino que debemos también reparar ese daño, restaurando la naturaleza, renaturalizando.

Desde el punto de vista urbano, las infraestructuras verdes representan también un instrumento útil y necesario para conectar los distritos de la ciudad. El medio urbano posee unas características propias que requiere una metodología específica para la identificación de la infraestructura verde urbana, pero que ya cuenta con una base de información en la Agenda Urbana Española (Ministerio de Fomento, 2018) o la Guía para la infraestructura verde municipal (ASEJA, FEMP, Red de gobiernos locales por la biodiversidad, AEPJP, 2018), ambas alineadas con la Estrategia Nacional de Infraestructura Verde y de la Conectividad y Restauración Ecológicas (IVCRE).

Según la Estrategia Nacional de Infraestructura Verde y de la Conectividad y Restauración Ecológicas fue aprobada mediante la Orden PCM/735/2021, de 9 de julio, cumpliendo así con el mandato legal contenido en la Ley 42/2007, de 13 de diciembre, del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad. Esta norma dedica su artículo 2 al ámbito cartográfico de la infraestructura verde. Señala en su apartado 1: “Las Administraciones Públicas son las responsables de identificar, en el ámbito de sus respectivas competencias, los elementos del territorio que conformarán la Infraestructura Verde de España, en base a los criterios establecidos en la Meta 0 de la Estrategia Nacional de Infraestructura Verde y de la Conectividad y Restauración Ecológicas. Para cumplir con la necesidad de normalización de la cartografía, evitando incoherencias entre las distintas escalas geográficas y Administraciones, dicha identificación se basará también en la Guía metodológica para la identificación de los elementos de la infraestructura verde prevista en la Estrategia Nacional, redactada en el seno del grupo de trabajo que opera en el marco de la Comisión Estatal de Patrimonio Natural y de la Biodiversidad.

Para cumplir con estos objetivos, las principales características de la Infraestructura Verde Urbana han de ser las siguientes:

  1. Servir de interfaz y zona de transición entre las zonas urbanas.
  2. Garantizar la movilidad ecológica y la mejora de la biodiversidad.
  3. Actuar como zona de protección de las áreas naturales frente a la expansión urbana.
  4. Permitir una mayor integración de la naturaleza en los municipios.
  5. Ofrecer a la ciudadanía un área de contacto directo con la naturaleza.
  6. Mejorar la calidad de vida y el estado de salud de la ciudadanía.
  7. Ser refugio para un elevado número de especies animales, entre ellas, las especies polinizadoras.
  8. Suponer una barrera acústica, reductora de contaminación y reguladora térmica.

Además de su papel en la lucha contra el cambio climático, tanto en mitigación como adaptación, hemos de resaltar sus numerosos beneficios sobre la salud:

  • Bienestar mental. Relajación
  • Ocio y tiempo al aire libre
  • Deporte y circuitos para la práctica deportiva
  • Mejora de las personas con enfermedades de carácter mental
  • Circuitos para la tercera edad
  • Juegos infantiles y prevención de la obesidad infantil / REMEDIAR EL GRAVE TRASTORNO POR DÉFICIT DE NATURALEZA, UN SÍNDROME QUE AFECTA CON ESPECIAL CRUDEZA A LA POBLACIÓN INFANTIL.
  • Rutas saludables
  • Atenuación del ruido
  • Disminución de la temperatura y reducción del efecto isla de calor
  • Atenuación de la contaminación y mejora de enfermedades pulmonares
  • Efecto paisajístico de la biodiversidad urbana sobre la salud

Así como las numerosas ventajas ambientales, destacando entre ellas:

  • Mejora la riqueza de especies de flora y fauna con una adecuada selección de especies y de hábitats
  • Minimiza el impacto de las especies alérgenas con una adecuada planificación
  • Mejora de la gestión de plagas, lucha integrada y planificación de insectos beneficiosos
  • Gestión de las aves urbanas, recuperación de especies autóctonas y eliminación de especies invasoras
  • Sumidero de carbono atmosférico
  • Filtro ambiental de contaminantes
  • Fuente de oxígeno
  • Capacidad de retención de agua
  • Disminución de la escorrentía superficial y del riesgo de inundaciones
  • Mejora de los sistemas de drenaje urbano
  • Mejora de la calidad del agua que llega a los acuíferos

A la luz de los numerosos beneficios ambientales y sociales de las infraestructuras verdes, consideramos que es fundamental el cambio de mentalidad y de acción política frente al cambio climático, una acción más proactiva que se base en:

  • “ZONAS PROMOVIDAS”, zonas donde se promueva de forma activa la biodiversidad, su riqueza y abundancia, y del mismo modo, cambiar el enfoque de “salvar la naturaleza” a “mantener y promover la naturaleza”.
  • ENTENDER ESTAS ÁREAS COMO ALGO A COMPARTIR CON LAS PERSONAS.
  • LA NATURALEZA NO PUEDE AISLARSE. Necesitamos generar conexiones, y solventar los efectos globales (cambio climático, contaminación).
  • PARTICIPACIÓN. Fomentar prácticas y sistemas de gobernanza donde esa participación sea real, como en los modelos de manejo comunitario de ecosistemas.
  • REFUGIOS CLIMÁTICOS (Propuesta aprobada en la Comisión de Control y Fiscalización de julio de 2023)

Por todo ello, el Grupo Municipal Con Podemos – Izquierda Unida propone los siguientes

ACUERDOS

  1. El Pleno del Ayuntamiento de Sevilla reconoce el estado de emergencia climática en la ciudad.
  2. Establecer mecanismos de gobernanza local a través de la creación de una Comisión participativa, donde tengan voz y voto la ciudadanía,  los movimientos sociales y medioambientales, para desarrollar Planes Estratégicos de infraestructuras Verdes y de Renaturalización de obligado cumplimiento que se integren en los Plan General de Ordenación Urbana.
  3. Mejorar la infraestructura pública existente y en el aumento de la red de zonas verdes de manera equilibrada en toda la ciudad, como elemento central para dar respuesta a la necesidad de medidas de adaptación para proteger sobre todo la población más vulnerable.

En este sentido, se proponen las siguientes medidas:

3.1. Planificación, diseño y gestión de parques urbanos y espacios verdes

3.2. Elaboración de normas para la ordenación de los árboles

3.3. Determinación de soluciones basadas en la naturaleza para su aplicación en la ciudad.

3.4. Incremento de la superficie de zonas verdes hasta alcanzar el horizonte deseable del 3-30-300: 3 árboles desde cada hogar, 30% cobertura arbórea en cada vecindario, 300 m distancia máxima a un espacio verde de al menos una hectárea.

3.5.Revisión de los proyectos y actividades de remodelación o mantenimiento planificadas y en curso sobre espacios verdes ya existentes bajo los criterios anteriormente descritos, con el fin de evitar retrocesos y reformular cuando corresponda aquellos que no estén enfocados en mejorar sus servicios ecosistémicos o incluso impacten negativamente en dichos ecosistemas urbanos, árboles, parques y jardines ya existentes…

Fomento de la agricultura urbana a través de la potenciación de proyectos de los huertos urbanos y escolares ya existentes y ampliación en otras zonas de la ciudad, que permita acercar a la ciudadanía los conocimientos y beneficios agroambientales, generando asimismo espacios de cohesión social.

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