Espadas desprecia nuestras enmiendas al presupuesto de 2018

Al final no ha habido sorpresas y el gobierno de Juan Espadas (PSOE) ha rechazado el grueso de las enmiendas registradas por Izquierda Unida al presupuesto del Ayuntamiento de Sevilla para 2018.

Y es que sólo 2,6 millones de euros de los 18 a los que ascendía el montante global de nuestras propuestas han salido adelante en la Comisión municipal de Hacienda, lo que supone tan sólo un 14 por ciento.

Ha de saberse que el PSOE es el único responsable de este maltrato a nuestras propuestas. No en vano, su voto en contra ha sido determinante para tumbar todas las enmiendas de IU que iban destinadas a desarrollar políticas de mujer y bienestar social, a reforzar los servicios públicos y la plantilla municipal o a incrementar la dotación de los planes integrales para las zonas más desfavorecidas al objeto de que Sevilla deje de ser una ciudad a dos velocidades.

Y no sólo eso… El PSOE también ha permitido, con su voto negativo, que se queden por el camino las propuestas de Izquierda Unida que iban dirigidas, entre otras cosas, a garantizar el deporte de base como un derecho de todos, a ampliar las inversiones en los barrios, a potenciar el fomento de la bicicleta, a mejorar la accesibilidad universal y los parques y jardines…

Definitivamente Juan Espadas ha dado la espalda a la izquierda. Las votaciones del PSOE en la Comisión de Hacienda así lo acreditan. O dicho de otra forma, se constata, una vez más, su giro a la derecha y su renuncia a combatir las desigualdades, a reforzar los servicios municipales y a construir una ciudad verde, accesible y sostenible.

Habrá que ver cómo el gobierno local reajusta lo aprobado en este órgano municipal y qué documento termina elevando al Pleno. Pero con estos mimbres, y siendo honestos y coherentes políticamente, es muy complicado que Izquierda Unida pueda apoyar las cuentas de Espadas para 2018.

Ya dijimos en su momento que el borrador presupuestario del PSOE era insuficiente, irreal e irresponsable. Que no respondía a las necesidades de la clase trabajadora y a las capas populares de la ciudad, sino a las prioridades partidistas y electorales de este partido.

Ya avisamos de que la escasa ejecución de las enmiendas de IU aprobadas en anteriores ejercicios constituía un mal precedente que no nos ofrecía ninguna confianza y que desacreditaba bastante a Espadas a la hora de defender sus nuevas cuentas para 2018.

Ya advertimos, además, que el acuerdo presupuestario alcanzado por el PSOE con Cs era incompatible con el respaldo de Izquierda Unida a la propuesta de Espadas, puesto que las prioridades de ambas fuerzas políticas son antagónicas… Pero lo sucedido en la última Comisión de Hacienda confirman nuestros peores augurios y suponen –salvo giro inesperado de última hora- un auténtico portazo a la posibilidad de desarrollar políticas de izquierdas desde el Ayuntamiento en lo que queda de mandato.